El parque natural de Pfyn-Finges

El parque natural de Pfyn-Finges, a orillas del río Ródano, es una reserva natural de importancia internacional debido a su extraordinaria variedad de fauna y flora. Es difícil imaginar su belleza: pensad que es un lugar natural destacado dentro de la ya de por sí majestuosa Suiza. Por ello, lo mejor es hacer nuestra ruta en bicicleta por el Ródano y descubrirlo de la mejor forma posible: pedaleando.

Pfyn-Finges, una naturaleza sin parangón

Los valores paisajísticos y naturales de doce municipios del centro de Valais les han valido la unión y la distinción como Parque Natural Regional de Importancia Nacional. Pfyn-Finges es un espacio de 277km2 que concentra una biodiversidad y una variedad ornitológicas sin igual, un parque vitícola, un importante patrimonio cultural y más de 350km de caminos y senderos para trekking o cicloturismo. ¡Y una muy buena parte de esos kilómetros los recorremos en nuestra ruta en bicicleta por el Ródano! Así que no olvidéis los prismáticos, que el vino lo ponen ellos.

El parque vitícola de Pfyn-Finges

La ruta en bici por el Ródano es también conocida como la “Ruta del Vino”, y al parque también se lo conoce el “Parque vinícola de Suiza”. De haber vivido en la Tierra, seguro que Baco hubiera elegido Pfyn-Finges para habitar.  Son más 80 las bodegas que se reparten en la zona, y que os harán disfrutar de vinos nobles del Valais, “grands crus”, Pfyfoltru y muchas otras especialidades más. Por fortuna, las etapas de nuestra ruta son fáciles y no excesivamente largas (dan tiempo para un buen aperitivo antes de cenar), y los buenos vinos siempre sientan bien.

En paisaje está repleto de mantos de vides que parecen infinitos. Pero no lo son, porque, para su belleza y contraste, el parque de Pfyn-Finges destaca por albergar un tupido y espectacular bosque que, de hecho, fue el que le dio el nombre.

El Bosque de Finges

El bosque de Finges (en alemán: Pfynwald) es uno de los mayores bosques de pinos de Europa Central. Es una gran reserva natural de diez kilómetros cuadrados que alberga incontables especies animales y vegetales. Lo perfila el Ródano, que hace de frontera lingüística entre las regiones de habla francesa y alemana.

La espectacular biodiversidad de la que hace gala hoy tiene su origen en procesos dinámicos que tuvieron lugar hace millones de años, como lavas torrenciales, inundaciones del Ródano y deslizamientos, así como por el clima cálido y seco del Valais Medio. Así que, lo de que “no hay mal que por bien no venga”, le viene a este bosque como anillo al dedo. Y a nosotros, que tanto disfrutamos de él durante nuestra ruta de 8 días.

Historia “humana” del bosque de Fynges

No sólo la historia geológica de este bosque es sorprendente. En el pasado, la zona era temida porque los ladrones, bandidos y saqueadores proliferaban en él. Los comerciantes y viajeros se veían obligados, a riesgo de perder la bolsa y la vida, a tomar el camino más lento, el que atravesaba Salquenen y Varonne, en la orilla derecha del Ródano. Perdían un tiempo precioso, porque el bosque estaba situado en una importante ruta comercial que conectaba los mercados del norte del con Milán.

Otro dato sobre su sangriento origen es que fue el escenario de la Batalla de los Finges en la noche del 27 de mayo de 1799, en la que se enfrentaron las fuerzas rebeldes del Alto Valais con las tropas francesas, ya que las últimas habían liberado anteriormente al Bajo Valais del yugo de los habitantes del Alto Valais y éstos últimos no se tomaron nada bien. El monumento de Finges todavía conmemora hoy en día este enfrentamiento.

Los despropósitos naturales han dotado Pfyn-Finges de una belleza sin igual y, los humanos, de cientos de leyendas e historias y de buen vino, haciendo que nuestra Ruta en bicicleta por el Ródano sea hoy de las más atractivas que proponemos.